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viernes, 3 de septiembre de 2010

ARTISTAS FORRADOS




No existe ninguna lista que nos muestre quiénes son los artistas mejor pagados del mundo ni mucho menos cuánto ganan, así es que resulta prácticamente imposible saber si los artistas visuales top ganan más lucas que los escritores de best sellers. Lo que sí hay es un ranking que muestra cuánto ganan los escritores: según la revista Forbes, la persona que hace más billete contando historias se embuchó 300 millones de dólares el 2008, el último año contabilizado. No hace falta decir que se trata de la novelista J.K. Rowling, autora que orbita en el mundo de los negocios a otro nivel, casi como para eliminarla por desproporcionada en comparación con los escritores que la siguen, los norteamericanos Jammes Patterson y Stephen King, que facturaron cerca de 50 millones cada uno en el mismo período.

Pero no la eliminemos todavía, en el arte también hay genios desorbitados que de repente le dan con el palo al gato, como Demian Hirst, el inglés que usa el mercado del arte como medio de expresión y que hace un par de años montó un remate en el mismo lugar donde se venden los Da Vincis y los Picassos. El remate batió el récord de ventas, Demian hizo 200 millones de dólares el mismo día que, al otro lado del Atlántico, desaparecía el banco Lehman Brothers.

El asunto es que el mercado del arte es bastante turbio. Si bien hay cifras de lo que vende cada artista en los remates, no tenemos datos de lo que venden en las galerías, por lo tanto, no hay comparación posible con los escritores y sólo podemos hacer algunas conjeturas medio tuertas. Pero hay un dato muy interesante: existe un pintor yanqui de tercera o cuarta categoría que está forrado y sin duda ha ostentado el título de número uno en ventas durante todo el último decenio, con la excepción del año en que Hirst se mandó el récord ya mencionado. Seguro que usted no ha oído jamás su nombre: Thomas Kinkade. Me desayuno. Según el Times de Londres, Kinkade ingresa unos 140 millones de dólares al año vendiendo reproducciones de sus obras. Véalas usted mismo en Google, se matará de la risa con sus pinturas, le recomiendo la serie de paisajes inspirados en los cuentos de Disney. Las novelas de Stephen King son una joya literaria al lado de las obras de Kinkade, hasta Corin Tellado es más sofisticada (ojo con esta vieja buena para batir récords: con 400 millones de libros vendidos es la escritora más leída en idioma español después de Cervantes; y eso no es nada, en vida publicó 4 mil títulos, es decir, escribió o mandó escribir un libro cada seis días durante 65 años. Una máquina la vieja).

Total, en el mundo del arte nadie le gana a la Rowling produciendo billetes, ni siquiera George Lucas con todo el peso de su apellido (Lucas, el personaje mejor pagado del cine, hizo 170 millones el 2008). Tampoco Madonna, la reina de las lucas pop, le hace sombra a J.K. (hizo 110 millones). Ni siquiera la figura mejor pagada en el mundo de la TV, que obviamente es una gringa, le hace la pelea a la Rowling (se llama Oprah Winfrey y es la persona afroamericana con más lucas; sus ingresos anuales llegan a 260 millones, 40 menos que J.K.). Ni siquiera los magos de verdad le ganan a ella, el ilusionista mejor pagado es David Copperfield, el ex de la Claudia Schiffer, que metió sólo 30 millones en caja el 2008.

Vámonos por las ramas: parece que aguacharse una sex símbol es muy buen negocio, el escultor que estaba casado con la Cicciolina, Jeff Koons, habría sido número uno en los remates si Demian Hirst no hubiese tenido tanto éxito con su excepcional venta en Sotheby´s (las obras de Koons recaudaron 115 millones de dólares ese mismo año). Pero ojo, en este caso toda esa plata no es par el artista, casi todas las obras que salen a remate son vendidas por coleccionistas, que son lo que a la larga se forran con el arte.

De hecho, las dos obras más caras de la historia fueron vendidas por la misma persona, el productor de música y cine David Geffen. Este tipo sí que ganó plata con el arte (el de comprar barato y vender caro). Sus dos pinturas, un Pollock y un de Kooning, fueron vendidas en 277 millones de dólares, casi un año de trabajo de la Rowling (un Legionario de Cristo, David Martínez, pagó 140 millones por el Pollock; un billonario que invierte el 20 por ciento de sus utilidades en obras de arte, Steven A. Cohen, pagó 137 por el de Kooning). Este David Geffen es judío, pelado, gay y el hombre más rico de Hollywood. Parece que en su momento también se casó con un sex símbol, el actor Keanu Reeves. Más allá de rumores, el hecho es que su modesto Chalet de Malibú luce la mejor colección de arte norteamericano de post guerra (los muros están tapizados con expresionismo abstracto, mucho Jakson Pollock, Jasper Jones y William de Kooning). La nueva obsesión de Geffen es comprar un diario, ha hecho varias ofertas por el Los Angeles Times y el New York Times. Y esto es un vaticinio: cuando se acerque a la muerte, usará todos los millones que ganó en el comercio de obras de arte y toda su influencia para comprar un objeto mágico azteca que hoy está en las vitrinas del Museo Británico. En tanto, la revista Forbes habrá publicado la lista de artistas más forrados.


LOS PERSONAJES FICTICIOS CON MÁS LUCAS

Viejo Pascuero (fortuna infinita)

Richie Rich (personaje de cómics de los años 50, es el niño más rico del mundo): 25 mil millones

Oliver Warbucks (personaje del cómic Annie la pequeña huérfana): 10 mil millones

Rico McPato (personaje de cómics de Disney): 8 mil millones

Thurston Howell III (personaje de La Isla de Gilligan): 8 mil millones

Willie Wonka (personaje de Charlie y la fábrica de chocolate): 8 mil millones

Bruno Díaz (Bruce Wayne, protagonista de Batman): 6 mil millones

Lex Luthor (archienemigo de Superman): 5 mil millones

J.R. Ewing (personaje de Dallas): 3 mil millones

Auric Goldfinger (villano de una película de James Bond): mil millones

Montgomery Burns (personaje de Los Simpsons): mil millones

Charles Foster Kane (personaje de El ciudadano Kane): mil millones

Fuente: Revista Forbes

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